Estamos entrando en la temporada alta del mercado del vino, y tenemos una palabra para usted.
Italia.
A pesar de su ancestral tradición vinícola, Italia no siempre ha sido considerada un país puntero en el mundo del vino.
Su reputación de ser un país de producción masiva de vinos poco consistentes (como el Asti y el Chianti), la dura competencia de las prestigiosas regiones vinícolas francesas y un enfoque de posguerra centrado en la cantidad por encima de la calidad impidieron que el vino italiano obtuviera el reconocimiento que merecía.
¡Cómo han cambiado los tiempos!
En la actualidad, Italia representa aproximadamente el 10% del mercado de vinos finos.
Su éxito se debe a la calidad excepcional de los vinos, a la fuerte demanda y a los precios competitivos, que hacen que los mejores vinos se revaloricen más de un 13% al año.
Los resultados pasados no equivalen necesariamente a resultados futuros.
Mientras que los mejores vinos de Burdeos superan a menudo los 1.000 euros por botella, los vinos italianos de calidad casi idéntica oscilan entre los 200 y los 300 euros, lo que los convierte en una opción mucho mejor para los coleccionistas que buscan valor sin renunciar a la calidad.
Después del anuncio de la semana pasada sobre el Roagna Crichet Paje Riserva 2004, hemos tenido una reacción increíble por parte de nuestros clientes.
Con existencias limitadas, no tardaron en volar de las estanterías.
Los vinos italianos están que arden.
No se preocupe si se ha perdido el Roagna; tenemos muchos otros que sabemos que le van a encantar.
Nuestro equipo de vinos ha elaborado una estrategia para ayudarle a aprovechar este impulso estacional y, al mismo tiempo, preparar su cartera para un crecimiento a largo plazo, en línea con nuestras nuevas rutas de salida de 2025.
El equipo sabe lo que busca y tiene excelentes contactos con algunos de los viñedos italianos más prestigiosos del planeta.
Asegúrese de dejarnos sus datos, si no quiere perderse vinos como el Roagna la próxima vez.
