Château Mouton Rothschild

Château Mouton Rothschild

Château Mouton Rothschild ha trabajado las vides desde principios del siglo XVIII, cuando la propiedad pertenecía a la familia de Segur, que también fundó otras fincas importantes de Burdeos, entre ellas Château Calon Segur. A lo largo de su historia temprana los vinos de la finca estuvieron frecuentemente entre los mejores de Burdeos. Un breve declive en la década de 1840 supuso que Mouton perdiera el estatus de Primer Cru en la Clasificación de 1855 que clasificaba las mejores fincas de la Ribera Izquierda por el precio de la botella.

En 1853 Mouton fue comprado por los actuales propietarios, la familia Rothschild, y la finca pasó a conocerse como Château Mouton Rothschild. Aunque la propiedad se compró inicialmente como inversión, en una generación los miembros de la familia Rothschild comenzaron a interesarse por la finca y la calidad de los vinos recobró su pasado esplendor.

Uno de los propietarios más visionarios de la finca fue el Barón Philippe de Rothschild que tomó el control de la finca en 1922 con solo 20 años. Entre los logros más destacados de Philippe se encuentra conseguir que Mouton fuera ascendido como finca de Primer Cru en 1973. Hasta la actualidad este éxito sigue siendo el único cambio en la Clasificación de 1855.

Las demás innovaciones de Philippe estaban relacionadas con el cambio drástico de la forma en que se hacía el vino fino en la región de Burdeos. Desde los años 20 insistió en que todos los vinos de Mouton se embotellaran en la finca en lugar de la costumbre habitual de venderlos en barriles a los negociantes que luego los embotellarían. El embotellado de los châteaux se convirtió rápidamente en una práctica habitual en Burdeos, ya que permite a la bodega controlar todos los aspectos del proceso de elaboración del vino y garantizar la coherencia y la calidad.

Después de la Segunda Guerra Mundial Philippe promovió la sorprendente tradición de Mouton Rothschild de seleccionar un artista diferente para diseñar la etiqueta de cada cosecha. A lo largo de los años la lista de artistas que han participado es un quién es quién del mundo del arte: Picasso, Salvador Dalí, Andy Warhol, Francis Bacon, David Hockney son solo algunos de los nombres famosos que han creado diseños de etiquetas a medida para Mouton.

El Grand Vin de la finca se describe frecuentemente como "extravagante" gracias a la gran opulencia y potencia de su audaz perfil de sabor y estructura, que requiere al menos 15 años de envejecimiento en bodega antes de estar listo para beber. Mouton suele utilizar solo el 50 % de su rendimiento anual para el Grand Vin con una gran parte de la fruta procedente de viñas de 50 a 100 años de edad. Esto significa que la producción está estrictamente limitada a un máximo de 20 000 cajas de Grand Vin por cosecha. Estos vinos icónicos funcionan muy bien en la bodega y son muy buscados en todo el mundo por los coleccionistas de vino y los inversores.

El Château Mouton Rothschild obtiene con frecuencia excelentes puntuaciones de afamados críticos internacionales de vino; la cosecha de 2016 obtuvo 100 puntos en The Wine Advocate de Robert Parker y 99 puntos en Wine Enthusiast. Otras cosechas recientes de mayor rendimiento son la de 2013, que ha mostrado un crecimiento del 70,1 % en los últimos cinco años.

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