
Clavis Orea
El nombre de esta prometedora finca de Saint-Émilion significa "llave de oro" en latín, un símbolo tradicional de hospitalidad que representa la pasión, la dedicación y un nivel de servicio excepcional. Los dos fundadores de Clavis Orea, Franck Jugelmann y Lahcene Boutouba, proceden de familias de restauradores y consideran que sus antecedentes han desempeñado un papel decisivo en su desarrollo como productores de vino.
Jugelmann aprendió a cocinar al lado de su abuela, y finalmente la sucedió en la cocina como chef en el restaurante familiar antes de dedicarse a la elaboración de vinos. Se dedicó a trabajar en las mejores propiedades, incluyendo el famoso First Growth Château Haut-Brion en el Médoc y el Saint-Émilion Grand Cru Classé Château Fonplégade. Boutouba, por otro lado, comenzó su carrera como sumiller en restaurantes de clase mundial como el Hotel Ritz y The Connaught. Después se dedicó a la venta de vinos y conoció a Jugelmann en Londres.
El fruto de este encuentro fortuito fue la decisión de arrendar 8 hectáreas de viñedos de la familia Rollet en Saint-Émilion para crear sus propios vinos. La primera cosecha llegó en 2015 y fue rápidamente acogida por los mejores restaurantes y clubes de miembros, incluyendo el Arts Club, 67 Pall Mall, y Sketch en Mayfair.
La clave del éxito de Clavis Orea es su combinación de calidad excepcional y precios muy accesibles. Jugelmann y Boutouba suelen producir unas 30 000 botellas por cosecha, con una mezcla dominada por el Merlot junto con proporciones más pequeñas de Cabernet Franc y un toque de Cabernet Sauvignon.
El estilo característico de Clavis Orea interpreta las tradiciones de Saint-Émilion de una manera completamente moderna, combinando un amplio carácter frutal con taninos firmes e influencia de roble bien integrada. Este vino joven envejece en una combinación de barricas y cubas de roble durante 16 meses para permitir que la belleza de los viñedos y las variedades de uva brillen por sí mismos.
Este es un Grand Cru accesible cuando es joven, pero también tiene la estructura y definición para envejecer con gracia durante un par de décadas o más. Entre las cosechas recientes más importantes se encuentran la de 2016, elaborada con 100 % de Merlot, y la de 2018, que obtuvo 95-97 puntos del aclamado crítico de vinos suizo Yves Beck.