Reino Unido
La Viceprimera Ministra británica, Angela Rayner, ha dimitido esta mañana. La semana en el Reino Unido ha estado dominada por el explosivo escándalo del impuesto de timbre en torno a la Viceprimera Ministra, Angela Rayner, un drama que ahora está en el centro del discurso político. Rayner era también Ministra de Vivienda del Reino Unido, lo que llevó a muchos opositores a afirmar que debería haber conocido las normas. Rayner admitió que había pagado menos de 40.000 libras en concepto de impuesto de actos jurídicos documentados por su piso de 800.000 libras en Hove, junto al mar, después de que le aconsejaran que podía acogerse al tipo "estándar" por haber vendido su participación en otra propiedad a un fondo fiduciario para su hijo discapacitado. Rayner se ha puesto en contacto con el asesor independiente del Primer Ministro sobre normas ministeriales y ha prometido cooperar plenamente y resolver el déficit fiscal. El escándalo ha provocado un intenso escrutinio por parte de los partidos de la oposición, actos vandálicos en su propiedad y una creciente presión dentro de su propio partido ante la inminencia del informe ético.
Por otra parte, los dirigentes laboristas siguieron bajo presión para responder con rapidez y transparencia. El primer ministro Sir Keir Starmer respaldó públicamente a Rayner, elogiando su remisión y aparente franqueza, al tiempo que insistía en que actuaría en función de los resultados del informe ético de Sir Laurie Magnus. El momento en que se produjo el asesoramiento jurídico y el contraste entre la defensa inicial de Starmer y el posterior reconocimiento de que Rayner se había remitido a sí misma han hecho que los votantes cuestionen la transparencia de la dirección.
En medio de las turbulencias políticas, otros acontecimientos destacables fueron las peticiones de reforma del régimen de compensación Windrush, tras conocerse que decenas de solicitantes han fallecido a la espera de recibir sus pagos. Mientras tanto, los parlamentarios laboristas se enfrentan a tensiones en política exterior: algunos instan a Starmer a evitar reunirse con el presidente israelí Herzog como parte de las relaciones diplomáticas en medio del conflicto de Gaza.
Estados Unidos
Al otro lado del charco, los mercados mundiales estuvieron atentos a unos datos de empleo en Estados Unidos más suaves de lo esperado, lo que desató el optimismo ante la posibilidad de que la Reserva Federal reconsidere su postura sobre los tipos de interés. Los bancos centrales intensificaron sus adiciones a las reservas de oro, lo que impulsó al oro a superar a los bonos del Tesoro estadounidense como activo refugio, unido a la ansiedad por la inflación y la inestabilidad geopolítica.
Para agravar el drama geopolítico, el expresidente Donald Trump sigue presionando a los países europeos para que corten las importaciones de petróleo ruso, con el objetivo de presionar a China por sus lazos con Moscú en medio del conflicto de Ucrania. En el sector energético, ConocoPhillips anunció su intención de recortar hasta un 25% de su plantilla, dando muestras de cautela en medio de unas perspectivas complicadas para los mercados del crudo.
Unión Europea
Dentro de la UE, el impulso en favor de garantías de seguridad a largo plazo para Ucrania se hizo más tangible. En una cumbre de la "Coalición de Voluntarios" celebrada en París, 26 países se unieron en torno a un marco que incluye compromisos militares y de defensa aérea, refuerza las sanciones a Rusia y ofrece nuevas esperanzas a la asediada nación.
Entretanto, las PYME europeas que hacen negocios en China informaron de la persistencia de problemas normativos, problemas de propiedad intelectual, retrasos en los pagos y aumento de la competencia, factores que están configurando una próxima respuesta política entre cámaras de la UE destinada a estabilizar las exportaciones y mantener unas relaciones comerciales justas.
China
China ha realizado importantes movimientos estratégicos esta semana. Selló formalmente un acuerdo energético a largo plazo con Rusia, avanzando en el enorme gasoducto Power of Siberia 2, capaz de suministrar 50.000 millones de metros cúbicos de gas al año. El acuerdo refuerza la alianza energética chino-rusa y señala un cambio en la dinámica de seguridad energética de Asia.
En su propio país, China celebró el mayor desfile militar de su historia para conmemorar el aniversario de la Segunda Guerra Mundial. Con líderes como Xi Jinping, Vladimir Putin y Kim Jong-un, este espectáculo militar fue una calculada muestra de unidad al margen de las alianzas occidentales.
Metales y petróleo
El oro reafirmó firmemente su papel de refugio mundial, sobre todo cuando los bancos centrales aumentaron las compras, situando las inversiones en oro por delante de los bonos del Tesoro estadounidense por primera vez desde mediados de la década de 1990. Los inversores, enfrentados a la inflación y a perturbaciones geopolíticas, recurrieron a la estabilidad del oro.
Los mercados del petróleo están evaluando posibles aumentos de la producción de la OPEP+, una expansión que podría moderar los precios en un contexto de aumento de la oferta. Al mismo tiempo, los cambios políticos, como la presión de Trump para que Europa abandone el petróleo ruso, apuntan a un posible reajuste de los flujos energéticos y las tendencias de la demanda a largo plazo.
Resumen
Esta semana ha estado marcada por importantes reajustes geopolíticos -especialmente el acuerdo sobre el oleoducto chino y el desfile militar-, mientras los mercados respondían con una mayor demanda de oro. La UE reforzó su compromiso con Ucrania, aunque persisten las fricciones comerciales con sus socios chinos. En el Reino Unido, el escándalo del impuesto de timbre de Angela Rayner ha ensombrecido las credenciales morales de los laboristas y ha puesto a prueba la unidad del liderazgo. Mientras tanto, Estados Unidos siguió recalibrando sus expectativas económicas y sus estrategias energéticas en una semana de cambio mundial.